Pasión en el agua.
El agua caliente de la ducha resbalaba por mi espalda, cuando pedí a mi siervo que me enjabonara, la espuma resbalaba entre sus manos recorriendo todo mi cuerpo, al tiempo que le tiraba de su collar introduciendolo en la ducha.
La excitación se apoderó de mi siervo.
Susurros, besos y caricias invadieron todo mi ser y su estado de excitación era ya incontrolable.
El agua caliente golpeaba nuestros cuerpos mojados que parecían bailar un vals inolvidable, para culminar en un apasionado desenfreno, al tiempo que nuestros corazones decían te quiero.
Lady Lorena.
El agua caliente de la ducha resbalaba por mi espalda, cuando pedí a mi siervo que me enjabonara, la espuma resbalaba entre sus manos recorriendo todo mi cuerpo, al tiempo que le tiraba de su collar introduciendolo en la ducha.
La excitación se apoderó de mi siervo.
Susurros, besos y caricias invadieron todo mi ser y su estado de excitación era ya incontrolable.
El agua caliente golpeaba nuestros cuerpos mojados que parecían bailar un vals inolvidable, para culminar en un apasionado desenfreno, al tiempo que nuestros corazones decían te quiero.
Lady Lorena.
Nada mejor que una buena ducha. Que os vamos a decir nosotros, con lo que nos gusta el agua.
ResponderEliminarBesos desde allí.